que aburrida se ha vuelto mi vida. si tal vez ahora pueda estar más tranquilo sobre mi estado mental, pero siento que he perdido toda la aventura. me siento bien ñoño en mi casa, leyendo libros sobre la genealogía de los dioses, que me gustan jajajaja pero chingado donde quedo toda esa autodestrucción y falta de honor y dignidad jajaja. lo sé ya no soy un rat, me volví viejo para ser un rat jajajaja. no importa, porque si algo importa ya no puedes ser un rat. ahora puedo ver a los jóvenes como un gato viejo que quiere ayudarlos, como uno que confía más en los chicos que en los viejos.
dicen que las drogas te vuelven paranoico, no recuerdo si ya era paranoico antes de consumirlas o si me convertí por usarlas. también dicen que las drogas afectan la memoria jajajajajajaja entonces la verdad nunca la sabre.
como quiera extraño a mis compañeros médicos, las historias de los primeros en usar kei en monterrey, de robos de kei, las teorías de porque escaseaba la kei. y la keta en si. es difícil ocultarlo, pero es que a veces siento un gran hueco en mi vida y no soy capaz de llenarlo. la vida en muchas ocasiones me parece aburrida y la kei era mi manera de volverla interesante. ver algo más, sentir algo más, pensar algo más, soñar algo más. chingado hasta mis sueños se han vuelto aburridos. como extraño soñar de verdad, esa sensación de que estás recibiendo información del cosmos a través de los sueños. ahora todo es tan cerebral, tan descifrable, tan humano. como extraño mi vida post-humana. es como leí en el libro de de Nerval, apenas recupere la razón y empece a extrañar la locura.
estamos atrapados en un estado mental inferior, y por más que tratemos salir de él, las soluciones nunca son permanentes. lo único que podemos hacer es suspirar por aquel mundo que hemos abandonado y restarle importancia a la vida en el estado actual.
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