Seres del Hiperespacio

Me llevaron en una gran nave por el espacio. Viajamos a través de la negra inmensidad hasta adentrarnos en un planeta con cielos púrpuras y hermosos mares color naranja. Aterrizamos en un complejo industrial, nadie fue a recibirnos sólo estaba la tripulación de la nave y yo. Los seres con los que viajaba llevaban túnicas blancas y trajes espaciales debajo. Sus rostros estaban cubiertos por mascaras de vidrio polarizado y por las capuchas de sus túnicas. Se comunicaban conmigo de manera telepática. Cada que tenían algo que decirme escuchaba sus voces dentro de mi mente y ellos escuchaban todo lo que yo pensaba. En ningún momento sentí miedo o desconfianza. Estaba demasiado maravillado por la belleza de los paisajes como para sentirme asustado.
Entramos a un hangar muy grande y todo estaba muy oscuro, la única luz salía de adentro de las estructuras de acero y columnas. Los seres me dijeron "Aquí es donde escogerás un cuerpo", mi mente se lleno de dudas al escuchar esto pero instintivamente mire a mí alrededor. Había miles de bolsas con pequeños seres humanos sin vida adentro. "Puedes escoger la forma que tendrás en este mundo. Hemos agrupado a todas las razas de acuerdo con sus antiguas creencias." Había hombres y mujeres y yo tenía que escoger una. Escogí y los seres tomaron el cuerpo con el que me identifique.
Después me llevaron a un cuarto completamente blanco, al final del cuarto por una pared bajó un elevador con tres seres en túnicas blancas. Su piel era café y tenían caras y manos alargadas. Caminé hacia ellos y el ser del centro estiró sus manos y me acercó una pequeña cajita de madera. "¿Qué es esto?" pensé y los tres seres me respondieron al mismo tiempo: "Es un regalo." La caja no se podía abrir y les pregunta: "¿Pero que hay adentro?" "Son tus amigos, eso te guiara." me respondieron. Me quede confundido sobre como funcionaba esa cajita, pero los seres no respondieron nada más y el elevador los volvió a subir. Me sentí muy feliz de recibir semejante regalo aunque no supiera bien como funcionaria.
Después de eso fui perdiendo la conciencia de haber estado en ese planeta, de haber estado con esos seres y poco a poco me fui convirtiendo en humano.